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Giuseppe Albatrino

Escritor, Dramaturgo y Divulgador Científico

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Cine y Televisión

Héroes de Ficción: MacGyver

1 junio, 2009 by Giuseppe Albatrino

MacGyver es uno de los héroes más inventivos de la televisión, no solo por sus excusas para evitar el uso de pistolas (con las cuales varios episodios terminarían a los cinco minutos) sino porque anda creando aparatos con clips o goma de mascar que encuentra en el camino. A diferencia del reservado Jason Bourne, nuestro anterior héroe comentado aquí, este huye de la violencia de la pólvora para usar otros intermediarios como el puño limpio o las trampas cazabobos que crea.

Como agente de la Fundación Phoenix es su deber rescatar personas, proteger testigos o recuperar tecnología robada. Pero muchas de sus misiones las hace en su tiempo libre, ayudando a amigos en problemas, gente con la que se cruza en la calle o defendiéndose de enemigos que no se cansan de visitarlo. Durante los siete años de la serie se irán revelando detalles del melenudo individuo que disfruta del jockey, escalar montañas e infiltrarse en países enemigos. También cuenta con formación científica que lo prepara para encontrar formas caseras de fabricar explosivos, detonadores, relojes, robots e incluso un avión ultraligero construido de bambú (sí, bambú), sin más herramientas que una navaja del ejército suizo que siempre lleva en el bolsillo.

Los productores de la serie, uno de los cuales fue Henry Winkler (el popular “Fonzie” de “Los días felices”), buscaban que los experimentos cumpliesen principios científicos. En los Estados Unidos apareció el termino “MacGyverismo” para señalar a aquellas personas que pueden improvisar soluciones de manera creativa con las cosas que tienen a la mano. Alguna vez conocí a un mecánico de aviación que por aquella época había recibido tal sobrenombre (¿se subirían ustedes a un avión reparado por él?)

MacGyver es un personaje entrañable que para muchos afianzó nuestro gusto por la ciencia. Ha sido referenciado en series como Los Simpsons o Family guy, en youtube podemos encontrar videos amateur con las aventuras de MacGyver en sus años universitarios (en clave de humor) e incluso los Mythbuster le han dedicado un programa exclusivo para examinar sus creaciones improvisadas. Nuestro héroe de hoy es, sin lugar a dudas, la personificación de la creatividad científica al servicio de la aventura.

Publicado en: Cine y Televisión Etiquetado como: héroes de ficción, McGyver, series, TV

A propósito de la película Star Trek

13 mayo, 2009 by Giuseppe Albatrino

Me considero un espectador casual de la saga Star Trek, pero dados los estupendos cometarios que la película número once ha recibido, sentí que no podía desaprovechar la oportunidad para ver un espectáculo de ciencia ficción en la pantalla grande. Coincido en que las dos horas que duró fueron muy entretenidas y que la entrada pagada valió la pena; sin embargo, y no se preocupen que no les echare a perder la película, el universo de Star Trek presenta, en mi opinión, ciertas inquietudes que quisiera compartirles.

¿El capitán de una nave espacial tiene que ser Rambo?
Espero que no, me gustaría ser uno de ellos, pero pareciese que para lograrlo tendría que aprender a pelearme a puño limpio contra extraterrestres de todos los colores y tamaños. Lideras una nave que vale miles de millones de dólares (sin incluir IGV), tienes a tu cargo miles de hombres y mujeres que dependen de tus sabias decisiones, pero a la primera oportunidad de lucha cuerpo a cuerpo ¿dejas el mando al equivalente de un practicante, mientras abandonas la nave mordiendo un cuchillo en la boca? Supongo que no tiene mucho sentido. Al menos claro que, en el futuro, “capitán de astronave” sea sinónimo de “infante de marina”.

¿Existen cinturones de seguridad en el siglo 24?
La siguiente es una escena clásica en la franquicia: la nave espacial se encuentra en plena batalla, siendo duramente golpeada por los láseres enemigos, mientras la tripulación a bordo de la misma lucha por no perder equilibrio, se balancean primero hacia la derecha, luego a la izquierda, se apoyan al unísono con las manos, se aferran a las paredes…todo tipo de acción, menos sentarse en sus sillas y engancharse los cinturones. ¡Por Dios!, ¿los cinturones de seguridad se volvieron obsoletos en este siglo?

¿Todas las naves espaciales vienen equipadas con Webcams?
Si bien los cinturones se volvieron obsoletos, parece que en el futuro las cámaras web tendrán un lugar prominente en los viajes espaciales. Sin importar la beligerancia entre las naves rivales, basta un simple comando del capitán para que la comunicación entre él y su enemigo, sea cara a cara vía video y audio, frente a frente, sin importar que quizá uno de ellos se encontrase en la ducha o la posibilidad de mostrar los mapas del puente de mando al enemigo.

¿Realmente saldría un humano con una chica de color verde?
Si bien soy respetuoso de las distintas relaciones que se pueden formar entre humanos de todos los géneros y razas (¡gracias ciudad de Amsterdam por mostrarme tu tolerancia!), me es difícil aceptar ciertas “combinaciones” de especies simplemente por sentido común. Debe ser embarazoso el no saber que hacer en la primera cita con una chica extraterrestre, ¿debo saludarla con un apretón de garra, cola o aleta? , ¿A cuales de los tres ojos debo mirarla?, ¿realmente las orejas puntiagudas son tan atractivas?

No dudo que estas no son todas las inquietudes que puede original este interesante universo ficticio, ¿algún lector quiere compartir la suya?

Publicado en: Cine y Televisión Etiquetado como: ciencia ficción

¡Los nerds ya tienen una comedia!… ¿tenemos?

18 abril, 2009 by Giuseppe Albatrino

        Cuando visito el campus de mi universidad, en donde coexisten todas las facultades una al lado de la otra, es obvio que el universo de personas que lo habitan esta formado por distintos grupos claramente diferenciados, los cuales no son difíciles de notar para un observador atento: existen los chicos de arte (distendidos pintando sus obras en las aulas o jardines), los chicos de letras (básicamente hablando y hablando) y los de ciencias e ingeniería (intentando aprobar los difíciles cursos). Habiendo pertenecido al último grupo, como muchos habrán podido suponer, mis experiencias de vida pertenecen a este sector y muchas de ellas se me vienen a la mente cada vez que veo una divertida serie que dan en Warner Channel y que quisiera recomendar: “The Big Bang Theory”.

        Cada episodio nos cuenta las historias de dos físicos veinteañeros, uno teórico y otro practico (curiosamente tengo un buen amigo que es ambas cosas a la vez) quienes viven al lado de una hermosa chica aspirante a actriz, llamada Penny; Sheldon y Leonard se caracterizan por tener problemas para sociabilizar con el sexo opuesto, un fuerte apego a la Internet, juegos en línea, comics, ciencia ficción (¿quién no?), productos electrónicos y una visión del mundo fuertemente influenciada por la ciencia. A estos compañeros de cuarto se les suman dos amigos que, como es de esperarse, son muy parecidos a los primeros: un ingeniero que construye dispositivos para la NASA a la vez que es un gran teórico de “cómo salir con chicas” y un astrofísico especializado en partículas, a quién le es literalmente imposible hablar delante de alguna mujer, pero que a pesar de ello (¿o quizá a raíz de ello?) ha tenido mayor suerte que sus compañeros tratándose de damas.

        Si bien la serie va por su segunda temporada, se han programado al menos otras dos; esto debido a su éxito que se basa en un humor inteligente que muchas veces hace referencia a conceptos populares de la ciencia o a las manías y obsesiones de sus simpáticos personajes que tienen problemas cada vez que intentan encajar con gente distinta (léase normal); la singular inteligencia de Sheldon va acompañada de una incapacidad para entender las emociones de los demás lo cual le hace decir frases al pobre Leonard como la siguiente: «Tienes tanta chance de salir con Penny como el telescopio Hubble de hallar en el centro de cada agujero negro a un hombrecillo con una linterna buscando el interruptor de luz», la cual me parece una forma muy creativa de decirle a un amigo que no tiene esperanzas con la chica bonita, dado que…bueno, esos tipos de agujeros ¡ni siquiera son observables en el espectro visible!

        La producción cuenta con un profesor de física y astronomía que verifica que los afirmaciones de los personajes sean correctas, así como también las ecuaciones y dibujos que ilustran las pizarras de estos, como aquella en que realizan un diagrama de red para decidir a que cine asistir, considerando las variables de distancia y restaurantes cercanos, o el diagrama de flujo del “Algoritmo de la amistad” que intenta colocar los pasos necesarios para obtener amigos. Estos cuidados detalles nos pueden hacer recordar a la galardona serie Numb3rs, con la diferencia de que aquí la historia es motivo de risas constantes.

        En suma, es una original y graciosa serie en donde, cada martes a las ocho, el pequeño nerd (o grande, dirán algunos) que muchos llevamos dentro por deformación profesional, puede relajarse un poco.

Publicado en: Cine y Televisión Etiquetado como: Big bang theory, nerds

Héroes de Ficción: Jason Bourne

15 abril, 2009 by Giuseppe Albatrino

       Jason Bourne es, sin lugar a dudas, uno de los más finos héroes que el mundo de los espías haya visto. Dado a conocer masivamente a través del cine en las películas protagonizas por Matt Damon, el personaje creado en 1980 por el escritor Robert Ludlum, abarca hoy en día más de nueve novelas, cuatro largometrajes y un videojuego; creo que el éxito de este radica, entre varios factores, porque inicia con una premisa original en el género: él mismo no sabe quien es o quien ha sido y mientras intenta descubrirlo intentarán matarlo no una sino repetidas veces en una serie de complejas intrigas.

        Si bien es cierto que, tanto en el medio fílmico como en el literario, sobresalen su habilidad para improvisar inteligentemente, su dominio de varios idiomas, su gran dominio de artes marciales y la serenidad casi no humana que toma en momentos de crisis, existen algunas diferencias que como lector de sus libros me gustaría compartirles, para presentarles al Jason Bourne de las novelas (¿el verdadero?).

        David Webb, ese es su nombre de nacimiento, es un académico especializado en el lejano oriente, quien en pleno conflicto de Vietnam trabaja para el Departamento de Estado en la vecina Camboya, lugar en el que vive con su esposa tailandesa y sus dos hijos (la fascinación con otras culturas a veces no se queda solo en los libros…). La tragedia llega a su tranquila vida cuando un bombardero deja caer sus bombas en donde se encontraba la familia de Webb, matándolos a todos; nunca se identificó el bando al que pertenecía la aeronave, pero para nuestro héroe… ¡la guerra se tornó algo personal!. así que se enlista para formar parte de un grupo secreto de mercenarios y criminales (gracias a sus contactos en el Departamento), patrocinado por el ejercito y creado para llevar a cabo misiones que los militares regulares no pueden llevar a cabo. El grupo se llama Medusa, y dentro de él adopta el nombre de Delta 1: se convierte en un líder cuya descripción nos recuerda a otro famoso personaje, el John Long Silver de “La isla del tesoro”: un hombre temible, renegado, siempre obedecido a quien sus hombres no dudan en seguir. Pero en cierto momento, descubre que uno de ellos es un traidor, y deben matarlo en la jungla. ¿Adivinan el nombre del vil traidor? es Jason Bourne.

        La guerra en el Asía termina, pero no con ella la sed autodestructiva que embarga a nuestro héroe, quien poco tiempo después es reclutado por la CIA, para integrar el proyecto Treadstone, con el objetivo de detener al criminal más temido de su época, un asesino sofisticado llamado Ilich Ramírez Sánchez, mejor conocido como “El Chacal”. Para lograr su cometido, Webb pasará a la clandestinidad y a diferencia de la interpretación de Damon, se dedicará a salvar vidas y no será un asesino entrenado del gobierno; debe tomar una identidad distinta, escoge el nombre de Jason Bourne. Tras un año de preparación y entrenamiento, fingirá ser la competencia del Chacal, tomando contratos para liquidar a personas importantes, las cuales simularán su muerte. Bourne trabajará primero en el oriente y luego en Europa, hasta el momento en que cae en una trampa del Chacal, que evidentemente quiere muerto a su presunto competidor. La trampa terminará con nuestro héroe desmemoriado y sumergido en el mar, momento a partir del cual empieza la saga.

        Al final del primer volumen, Bourne sabrá quien es en realidad, pero no hubiera sobrevivido sin el apoyo de una mujer sensata, centrada y economista de clase mundial quien nunca creyó que el desconocido que tenía delante de ella era un asesino: Marie St. Jacques. A partir de allí, las aventuras (casi involuntarias) continuarán en búsqueda del temible Chacal.

        En mi opinión, en ambos medios se destacan características que hacen de este espía amnésico un héroe de ficción superior; sería cuestión de gustos el decidir si aceptamos la trama interpretada por Damon, aquella que recreamos en nuestra lectura o ambas.

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Post Scriptum: Quiero aprovechar esta entrada para agradecerles por tantas muestras de apoyo y cariño que he recibido de ustedes, amigos, amigas y familiares a raíz de la noticia de mi intervención al ojo.
Gracias a Dios la operación fue satisfactoria y ya empecé el postoperatorio (consistente en muchas gotas y chequeos continuos con el doctor en Lima), esperamos que mi «nuevo» ojo alcance 100% de visibilidad en un par de meses.

Publicado en: Cine y Televisión Etiquetado como: Cine, héroes de ficción, Matt Damon

Sobre los héroes odiados

22 enero, 2009 by Giuseppe Albatrino

Advertencia: En la presente entrada se expone el final del libro siete de Harry Potter y el de la película “Ángeles de cara sucia”

Uno de los relatos de Jorge Luís Borges que capturó mi atención, cuando lo leí años atrás, es “Tres versiones de Judas”, publicado en su libro “Ficciones”; en el señala que así como el asceta, envilece y mortifica la carne para mayor gloria de Dios, Judas hizo lo propio con el espíritu. Es más, “[…] renunció al honor, al bien, a la paz, al reino de los cielos, como otros, menos heroicamente, al placer.”; una de las conclusiones del texto es que Dios escogió un ínfimo destino, ¡Eligio ser Judas!. Es evidente que tamaño disparate teológico, pero inteligentemente planteado a través de sus páginas, no tenia por meta la de crear una nueva religión, ya hay muchas, sino la de provocar al lector: ¿acaso no es más meritorio el sacrificio silencioso?, y ante este, ¿no lo es aún más el enfrentar el rechazo de todos?

Creo que muchos necesitamos héroes, ellos representan lo mejor a lo que podemos llegar, muchas veces son fuente de inspiración colectiva para una nación o creencia; quizá por ello encontramos tantos de estos personajes en las películas y en la ficción en donde la mayor parte del tiempo se nos muestran como individuos admirados por sus acciones, la menos de las veces son anónimos y en escasas ocasiones realmente odiados. Tomemos como ejemplo a Severus Snape, el maestro de Harry Potter que es aborrecido por muchos a través de los siete libros del mago de J.K. Rowling. Página tras página se nos muestra como un mago desaseado y hasta repulsivo que le hace la vida imposible a nuestro mago favorito, su origen como ex colaborador de Voldemort, lo hace sospechoso para muchos y su conducta a favor de sus propios alumnos lo hacen sumamente odioso; en el momento culminante del penúltimo libro, traiciona y asesina a sangre fría al amado rector de la escuela de hechiceros para lo cual usa una maldición imperdonable. No es hasta el final del tomo siete, en que Harry se entera de manera casual que Snape, ya a punto de morir, había actuado por ordenes directas de Dumbledore y que siempre le había sido leal a este, desde el momento en que abandona el bando de las tinieblas. Su sacrificio había posibilitado la victoria.

Otro caso es el que podemos ver en la película “Ángeles de cara sucia”(1938), James Cagney encarna a Rocky Sullivan, un duro gangster que vuelve a su viejo barrio en donde Jerry, su amigo de la infancia ahora convertido en cura, intenta mantener a los jóvenes alejados del crimen; sin embargo, estos terminaran idealizando al primero. Luego, un Sullivan apresado y sentenciado a la pena de muerte, es visitado por el cura que le pide que camino a la silla eléctrica, actué como un cobarde para evitar que los chicos sigan su camino. Aunque se niega inicialmente, termina haciendo lo que se le pidió, “destruyendo” con este acto final e irreversible, la reputación que se había forjado durante toda su vida, intercambiando el desprecio de sus seguidores por la salvación de los mismos.

Ignoro porque escasean este tipo de caracteres en el mundo de la ficción, quizás se deba a la dificultad de imaginar que alguien prefiera, contra la propia naturaleza humana, ver su propia imagen destruida a cambio de un bien mayor.

Publicado en: Cine y Televisión Etiquetado como: héroes

Los villanos de la ficción

20 enero, 2009 by Giuseppe Albatrino


Los villanos de las películas, son personajes (no necesariamente personas) muy importantes; Alfred Hitchcock señalaba que “más exitoso el villano, más exitosa la película”, reivindicando así a aquellos que asumen el rol del “tipo malo” para, finalmente, hacer quedar bien al héroe de nuestra historia. Sin antagonista, la mayor parte de las aventuras podrían tornarse aburridas, aunque para autores como Ben Bova, es mejor no incluirlos dado que “[…] en el mundo real no hay villanos. Nadie tiene intención de hacer maldad”.

Desconozco si para el lector, Bova peca de ingenuo, pero no me es difícil suponer que muchas películas no nos hubieran atrapado como lo hicieron, sino contasen con un villano cruel y desalmado, casi imparable en la búsqueda de sus metas; sin importar que estos puedan ser codiciosos, sicópatas, androides o magos desalmados están allí, para hacer más interesante la historia, quizá para hacer que el premio del chico bueno valga más la pena de disfrutar una vez obtenido. En la Internet figuran diversos listados con los “malos más malos”, aquí me permito enumerar algunos, provenientes de distintos géneros, según mi cosecha:

Darth Vader. Personaje de elevada estatura y de vestiduras negras; el señor del Sith no solo hizo la vida difícil a toda la galaxia sino que realizo serios destrozos en su propia familia: corto la mano de su propio hijo, a quien luego mando a congelar, torturo a su propia hija y futuro yerno (la princesa Leia y Han Solo) y para rematarla destruyó, mediante una astronómica explosión y a la vista de su progenie, el planeta de la susodicha con habitantes incluidos. ¿Es posible ser más malvado que él?, no lo creo; sin embargo, su creador lo redimió en el tercer episodio de la saga.

Si alguien tiene duda sobre la trascendencia cultural de Vader (curiosamente su apellido significa “Padre” en holandés), si se encuentra frente a la Catedral de Washington en Estados Unidos y aguza bien la vista, quizá alcance a ver la gárgola que con su imagen han colgado en los exteriores del templo.

Hannibal Lecter. Alías “el caníbal”. Su maldad no reside en el número de victimas en su haber, sino en la manera en que emplea su erudición y conocimientos sicológicos para dominar a sus victimas. Catalogado como psicólogo sociopata es incapaz de sentir el dolor que inflinge. Inicialmente habitante del mundo escrito, paso a formar parte del celuloide en la soberbia caracterización de Anthony Hopkins, y luego, en las numerosas parodias que de él se hacen.

Ben Linus. Este personaje de la serie televisiva Lost cuenta con una legión de seguidores en la Internet. A diferencia de los dos malvados anteriores, esté tiene cierto carisma; a pesar de no tener las características típicas que la ficción otorga a los lideres, Ben es más bien calvo, pequeño y de ojos saltones, “los otros” cuentan con su guía y el camino que les traza. Siempre con un plan a la mano, se encarga de hacer la vida difícil a los sobrevivientes del vuelo 815, para lo cual emplea el arte que más domina: la manipulación de los eventos, circunstancias y personas. Sin duda para él, la información es el activo más importante.
¿Hay otros villanos? ¡Cientos! ¿Cuál es el que a ustedes más le atrae?

Publicado en: Cine y Televisión Etiquetado como: héroes

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