Diez relatos oscuros que te invitarán a quedarte, incluso después de haber cerrado el libro.
Algunos de estos cuentos han encontrado ya su espacio en editoriales y periódicos, mientras que otros han esperado pacientemente en las sombras de mi disco duro, aguardando su momento para ser leídos. Cada uno de ellos ha sido revisitado, transformado, y ahora está listo para cobrar vida.
A diferencia de mis obras de teatro, no habrá actores ni directores entre tú y mis palabras. Esta vez, la experiencia es solo entre nosotros. Puedes recorrer estas historias en el orden que prefieras, navegando entre lo macabro, lo sobrenatural y lo inesperado.
Te presento los mundos que te esperan:
- En «La ambulancia Catrina», la Huesuda aparece para confrontar los sentimientos de un esposo en una solitaria carretera. Siempre he creído que es en los caminos apartados donde las peores pesadillas encuentran su escenario perfecto.
- En «Ritual de despedida», tras unos sueños extraños, dos amigas realizan un viaje para averiguar si una de ellas es la heredera de la Bruja de Cachiche.
- En «Ojos de Manila», te traigo una historia situada en la lejana Filipinas, en el Cementerio del Norte de Manila, un lugar donde muchas familias han establecido sus hogares entre los mausoleos y tumbas debido a la falta de vivienda en la ciudad. Es una comunidad única que realmente existe.
- En «Por accidente», la historia ocurre en un bosque sin nombre. Quise contar algo que comenzara con un hombre que, abandonado a la intemperie, no recuerde quién es o dónde se encuentra. Es un motivo recurrente en la narrativa de ficción, pero espero haberlo llevado por nuevos caminos.
- En «El primer caso paranormal del doctor Fatra», nos acompaña un personaje muy querido para mí, que aparece en una obra de microteatro que se montó durante la pandemia. Ojalá tenga más casos en el futuro, pero por ahora comenzamos con este: una celebridad del mundo paranormal recorre en vivo, para la televisión nacional, los recovecos de una casa de la que se dice que está embrujada.
- En «Ningún zombi fue lastimado en esta filmación», un director obsesionado con el realismo exige zombis verdaderos (que aquí sí existen) para su película. Sin embargo, estos también tienen derechos.
- En «La pluma del arcángel», un sacerdote jesuita busca emplear sus conocimientos de matemáticas para encontrar patrones en el comportamiento de los confesantes y así poder prevenir el pecado. ¿Qué podría salir mal?
- En «El vecino de Huinmayoc», un heredero regresa a la casa de su abuelo, situada en medio de la selva, y debe enfrentar a unos vecinos que buscan quedarse con la propiedad.
- En «Houston, ¿hay alguien aquí?», uno de los pocos astronautas que caminó en la Luna en la década de los setenta nos cuenta lo que encontró en su viaje: algo de lo que no podría haber hablado antes.
- En «El monte», nuestros personajes se debaten ante el último encargo que deben cumplir en lo que para ellos son tierras muy lejanas.